El miércoles se celebraba el clásico del fútbol español, el Real Madrid-FC Barcelona. El partido la verdad no tenía muchos alicientes deportivos, el Madrid ya era campeón de liga y el Barcelona tenía casi perdida la segunda plaza por lo que todo el interés lo centraba el morbo del paseillo previo que debía hacer el equipo culé. Una vez acabó el famoso pasillo, se comenzó a jugar al fútbol.
Al principio la intensidad parecía la de un partido amistoso de pretemporada pero, a medida que avanzaban los minutos el Madrid se desperezó y consiguió dos goles después de sendos fallos arbitrales del colegiado.
Después de esto se podría decir que el resultado fue condicionado por esos errores pero nada más lejos de la realidad, lo que pasó en realidad fue que un Madrid bien organizado veía como un Barça con las marcas mal fijadas le daba facilidades para conducir el balón y se mostraba desconcentrado en defensa.
El resultado lo dice todo, 4-1. Todos los culés (entre los cuales me incluyo) acabaron cabreados con el presidente y los jugadores, solución: Ayer día ocho de mayo Laporta anunciaba la destitución de Rijkaard a final de temporada y a su sucesor, un inexperto Guardiola (al cual analizaremos en los próximos días). Así él se mantiene en el poder, lo cual no es del agrado de muchos socios que hoy mismo han presentado una moción de censura en su contra.
2 comentarios:
Buen resumen de lo que fué el partido.Un Madrid muy metido en el partido ante un Barcelona desorientado, cada jugador no cumplía su faceta, sin ningún rigor tactico y animicamente muy tocado con los dos primeros goles que encajaron.
En fin con ese cambio en el banquillo para el año que viene, será una especie revolución que querrar hacer Laporta y su directiva,para mi se va un señor que a sido y lo seguira siendo uno de los mejores entrenadores que a tenio el Barcelona en su historia. un saludo.
Buen resumen, pero poca cosa se pueden decir de un partido donde sólo existió un equipo en el césped.
Saludos
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